«Contaremos con fichajes de Huelva, los que realmente quieren estar»

Primera parte de la entrevista al director deportivo del Recrerativo de Huelva, Dani Alejo, en el que repasa su trayectoria como director deportivo en otros clubes, además de analizar la actualidad deportiva, marcada por el mercado de fichajes, las posibles salidas y el rol que desempeñará el nuevo entrenador, Alberto Gallego.

Dani Alejo es la imagen de la ilusión personificada. El algecireño no para de hacer y recibir llamadas, de hablar con clubes, jugadores y representantes. En su mente tiene diseñado el Recreativo de Huelva del futuro. Un equipo que quiere recuperar el lastrado ánimo de sus aficionados, en una temporada atípica que solo puede terminar de una única manera. Un ascenso que deberá conseguirse desde el trabajo duro y la unión de todos.

Es el mensaje que se manda desde el club y todos los integrantes que conforman el nuevo Decano, en la Tercera RFEF. Son muchas las dudas a aclarar y que mejor que conversar con el máximo y único responsable deportivo en el club. Dani Alejo llega para triunfar, otra cosa no entiende. En una amplia entrevista concedida a Albiazules.es, el ex de equipos como Estepona, San Roque y Algeciras repasó la actualidad albiazul, además de contarnos su trayectoria en el mundo del fútbol.

– ¿Cómo ha llegado Dani Alejo al mundo de la dirección deportiva y la secretaría técnica?

«Yo estaba terminando de estudiar derecho y como había dejado el fútbol en mi segundo año de juvenil porque me centré en la Universidad, se ve que tenía que vincularme de alguna manera al tema del fútbol. Me saqué el nivel 1 y el nivel 2 de entrenador, además de centrarme en otros temas. Al final de mi carrera, derecho, me permite tocar temas contractuales. Entonces, me vinculé al tema de representación de jugadores. Ahí empiezas a tener relaciones con directores deportivos, con presidentes y con gente del mundo deportivo. Al final empiezo en ese mundo, del que no me puedo quejar porque tuve contacto con jugadores de Primera, de Segunda y de Segunda B, además de extranjeros. Participé en tres o cuatro operaciones bastante importantes, también al nivel del extranjero y al final por un tema personal decido dejarlo un poco. Es entonces cuando el presidente del Estepona, ya que yo asesoré con anterioridad a equipos para hacer plantillas en Segunda B, me dice que me vaya con el director deportivo, para echarle una mano y para que fuera el secretario técnico. Ahí es cuando empezamos a estar implicados en clubes, sin que fuera una colaboración y más de seguido. Estuvimos ese año en Segunda B y yo por ejemplo firmé a Rubén Cruz, que venía del Betis Deportivo y me lo llevé al Estepona, hizo 9 goles y en la siguiente campaña fue pichichi con el Albacete».

«Como a mí me gusta la cantera, siempre he intentado estar vinculado a ese mundo en todos mis proyectos. Estuve en el San Roque en Tercera, sacando a muchos jugadores jóvenes y recuperando a jugadores que había representado como Stoichkov, al que llevé al Espanyol. De hecho, el mejor año histórico del San Roque fue ese. El San Roque tiene poca historia en Tercera División, pero de los seis años que estuvo, el mejor fue el año que yo estuve y el equipo terminó el equipo quinto o sexto, en el que Stoichkov tiene un papel importante y al año siguiente se traspasó en enero a la Balona, y después fue traspasado al Mallorca».

«Del San Roque me fui a Gibraltar, donde tengo muchas amistades en el Peñón, hasta que me llamó el presidente del Algeciras para me incorporara allí. Había un director deportivo y querían que asesorara al club en tema deportivo y que estuviera en el departamento jurídico. Y ya con las elecciones que se producen, ya que el presidente agota su cargo y quiere convocar elecciones a los tres años y medio, y uno de los candidatos, que era compañero de junta, me dice que quiere que siga, pero que hay que dar un saltito más. Quería que volviera a la dirección deportiva, y que me encargue del club que era necesario. Al final ganamos las elecciones y a partir de ahí empezamos a funcionar otra vez. En principio el equipo iba en caiga para el descenso, que fue lo que motivó al presidente a convocar las elecciones y entonces en ese mercado hay que tomar decisiones drásticas porque el equipo no reaccionaba y lo peor que uno puede hacer es ver las necesidades, y ver donde uno se está equivocando y no tomar decisiones. Eso es quizás lo que lastra a los equipos. ¿Qué es lo bonito? Presentaciones de fichajes, las incorporaciones… Pero a la hora de tener que decir que me he equivocado y hay que tomar una decisión, ya que, si no es un doble error, pues la gente no entiende eso. Tiende a evadirse y a esperar si el tiempo corrige situaciones que son irreconducibles, y más en el fútbol, que todo tiene un principio y un fin, y no te da tu tiempo porque es muy corto. En ese mismo invierno yo hice dos traspasos, un canterano al Eibar y la de Antonio Domínguez a Polonia, que el Algeciras hacía años que no traspasaba a nadie, y después tuve que dar ocho bajas y traer ocho incorporaciones. Y a las dos semanas y media tomar la decisión de que el míster no puede continuar y también tengo que cambiarlo. No me tembló mucho la mano y al final salió bien porque de primera hora las incorporaciones que se hicieron dieron resultados y de las ocho incorporaciones, cinco funcionan, algo muy complicado en el mercado de invierno en el que los límites de jugadores disponibles son relativamente cortos. Y también las capacidades económicas, ya que el Algeciras no tenía un potencial que dijera que pueda posibilitar que se pueda acceder a un jugador determinado. Con dichas carencias, al final se elige bien y al final de ir en picado para abajo en los partidos de casa, perdiendo en Yecla y Villarrubia, pasamos a ganarle al Badajoz que iba líder y tiene que destituir a Nafti, también empatamos a uno con el Cartagena y al Córdoba le ganamos en el Arcángel por 0-1, a un equipo que llevaba más de un año sin perder en su estadio y en casa empatamos con el San Fernando. Entonces, el ‘Tourmalet’ que se suponía que nos iba a condenar a los últimos puestos, al final lo salvamos de una manera muy digna y con un cambio de actitud de juego y compromiso notables. Lo que el espectado quiere es que el equipo se deje la piel y eso fue lo que ocurrió. Esa actitud se cambió y luego llegó el Covid, con todo lo que eso conllevó. Nosotros pasamos de dinámica de descenso pasamos a estar en puestos de promoción».

«Con la creación de la Primera RFEF nosotros cambiamos de mentalidad. Teníamos la temporada anterior un presupuesto de 930.000 euros y nos vimos en la obligación de tomar una decisión dura. Al final, por encima de hacer una buena temporada estaba la posibilidad de descender pro impagos. El Algeciras tiene 1.300 o 1.400 socios que son los que siempre están ahí y no dependen de que el equipo haga un buen año para renovar. Sabíamos que iba a ser un año muy complicado y que no habría público hasta enero, por lo que el club decidió ser austero y competir con lo que tenemos, y quitarnos del presupuesto cualquier ingreso por taquilla para no equivocarnos y reducir el sueldo de plantilla en casi 150.000 euros. Y al final nos quedamos con un presupuesto de 340.000 euros para una temporada y con el objetivo del ascenso a la Primera RFEF. Siempre se dijo y se asumió, ya que el club tenía una serie de deudas con Hacienda y Seguridad Social, que al final si no nos metíamos en la Primera RFEF la estabilidad se iba resentir mucho. Afrontamos ese reto y al final hicimos 19 incorporaciones. Solo continuaron cuatro jugadores de la temporada anterior, una revolución en todos los aspectos. Desde los jugadores, la forma de trabajar con el staff técnico metiendo dos preparadores físicos, se refuerza la preparación de porteros, los físio… En un año tan complicado, no podamos permitirnos perder jugadores por lesión por mucho tiempo. Al final se batieron las expectativas y nos metimos en la fase de ascenso a la Segunda A, con una ocasión en el minuto 86 que se llega a meter hoy estaría el Algeciras en la LFP. Un logro para recordar muchos años».

– Una vez ya asentado en Huelva, ¿entiendes que haya gente que asevere que la plantilla del Algeciras la hizo Salva Ballesta y no tú?

«Cuando asumo el reto de ser el director deportivo sé que me expongo a la opinión pública. Está claro que, si uno no acierta en las incorporaciones, las críticas van a venir para uno. Y si se acierta con los fichajes, yo siempre intento mantener un perfil bajo. Yo creo que un director deportivo no tiene que ser portada de ningún medio ni nada parecido. Los verdaderos artífices de todos los logros deportivos son los jugadores. Nosotros tenemos que estar en un segundo plano y trabajando en silencio. Si es verdad que hay gente que se puede dejar llevar por los comentarios que pueda hacer uno u otro, pero son comentarios hechos desde el total desconocimiento y el que siguiera el día a día del club, sabe de más que la conformación de la plantilla la hago yo. De hecho, el presidente es consciente de las incorporaciones cuando se hacen. Pasa como aquí, se van cerrando fichajes hasta que el club entiende que se deben hacer públicos. Son cosas que al final están ahí y Salva tenía conocimiento de muchas cosas, pero del grupo y de los jugadores no tanto. A ver, es normal porque ni yo puedo conocer al 100% a todos los jugadores de la categoría, ni tampoco me meto yo en el tema de los entrenamientos. Salva tuvo una incidencia tremenda en el rendimiento del equipo, eso no lo puede negar nadie y también es cierto que ese saber hacer lo hace sobre una plantilla que da el nivel. Se unieron varias cosas. Todo lo positivo que podía pasar terminó pasando al igual que en el Recre pasó lo contrario. Algeciras y Recre fueron el Yin y el Yang».

– ¿Cómo se puso en contacto contigo el Recreativo de Huelva? ¿Cuál fue el proyecto que se te puso encima de la mesa y que fue lo que te sedujo para recalar en el Decano?

«Tuve muchos ofrecimientos de distintos equipos. Tuve hasta siete ofertas para irme a otros equipos y lo que más me llamó, y me caló fueron las enormes ganas de hacer las cosas bien. De saber que se habían fallado en algunas situaciones y que había que cambiarlo. Por ello confiaban en mi persona para llevar ese cambio. Es verdad que otros equipos te decían lo mismo, pero para mí no era tan importante la categoría en la que militaba el club como las condiciones que podía tener. Yo podía haber ido a dos Primera RFFE, en equipos con medios alcance, en cuanto a condiciones de trabajo para el equipo, que no iba a ser las mismas. Para mí eso es importante, el jugador tiene que tener una estabilidad emocional y económica, que no haya impagos, tienen que tener buenas condiciones de trabajo y se tienen que solucionar los problemas que en el día a día puedan tener, como lesiones o no lesiones. Yo cuando me pongo a firmar jugadores o me pongo a pensar en que puedan aportar y cumplir una serie de requisitos, pues a la hora de valorar todas las posibilidades para irme, pues me pongo a valorar esas cosas. No soy de los que valora el tema económico o el presupuesto que voy a tener, quizás por ello en alguna ocasión puedan pensar que soy un osado o un loco porque me vine a Tercera, con toda la vorágine que hay. Se puede descender con otra imagen que no se dio y eso hace que la gente pueda estar crispada, con una sensación de impotencia. No han podido aportar los suficiente porque no han podido estar aquí para decirle al jugador… Cuando saltan al campo están representando a todos. Desde la gente del Consejo a todos los aficionados, las peñas e incluso los que no vienen. Esto es algo que al final repercute todo el tema deportivo en la ciudad y eso es importante. Al final, uno valora todo y decide que no se le puede decir no al Recre».

– ¿Qué conocías anteriormente del Recre? ¿No te echó para atrás las referencias que hayas podido conseguir de estas últimas temporadas?

«Para nada, no me ha supuesto ningún hándicap. Con algún jugador de aquí con el que he tenido alguna reunión para saber si renovaba o no renovaba, yo lo único que le he dicho del año pasado es que yo no estaba. No puedo ser culpable de la dejadez o no dejadez, de haber tenido que apagar incendios… Yo entiendo que al final ha habido cosas que no se han podido hacer y no se han hecho porque no se podía, no se quería o no había tiempo, sino porque había otras cosas urgentes que hay que solucionar. Cuando se tienen que apagar tantos fuegos, no puede llevar a otro tipo de cosas. Yo creo mucho en el trabajo, otros lo llaman suerte. Se que el trabajo cuando se hace concienzudamente y se toman decisiones desde el total convencimiento, eso al final da sus resultados. A la hora de elegir un entrenador o un jugador o a la hora de decidir sobre alguna situación, uno tiene que haberlo meditado y no puede dejarse llevar sobre un estado de negatividad. Yo soy muy positivo, yo afronto pensando que todo va a salir bien y teniendo en cuenta también la posibilidad de que salga mal. Eso hay que tenerlo claro. Esto es como el que dice que no pasa nada porque mañana echa el Euromillón y le toca. Uno tiene que prever que las cosas pueden ir mal para poder tener soluciones. Eso es importantísimo. Uno no se puede autoengañar. Por eso, desde el convencimiento que el trabajo da resultados No puedo decir que todo lo que he tocado lo he transformado en oro, pero si es verdad que los últimos años todo lo que he planteado ha salido muy bien. Con mejores resultados de lo que a priori estaban en mi cabeza. Con esas ganas y esa ilusión he venido aquí, a tomar una serie de decisiones que me lleva tomarlas desde el conocimiento de la situación. Entonces, entro donde creo que tengo que entrar».

«Una de las condiciones que le pongo al Recreativo es tener la plena capacidad de decisión en el plano deportivo, de todo el club y hago especial énfasis en el primer equipo, el filial y el Juvenil de División de Honor. Desde fuera la sensación que yo… Es que cuando tengo las diferentes opciones para irme, yo voy viendo que movimientos hay y para ello me informa con la prensa de Huelva, como con la prensa de los otros sitios donde tenía ofertas. Veo algunas tertulias que están a disposición en YouTube, variopintas… Gracias a Dios había tres que podía ver y uno sabe entonces como está la situación y actuar después».

– ¿Qué Recreativo de Huelva te has encontrado a tu llegada a nivel profesional, humano y de instalaciones?

«Me he encontrado con un grupo humano en el club, no con mucha gente o al menos como yo me esperaba, pero si es muy bueno. Yo veo que el grupo humano que hay es espectacular y lo digo de verdad. En cuanto a las instalaciones, está claro que pueden ser mejorables, pero el club tiene unas instalaciones adecuadas y son las justas para poder sacar cualquier objetivo que uno pueda plantearse. Es verdad lo del césped sintético, está claro que debería estar mejor, pero como he dicho en mi presentación que he ido a campos que estaban muchísimo peor y se ha jugado. Y se ha tenido que jugar con ‘multitacos’, Dios mío… Está claro que todo es susceptible de estar mejor, pero a veces son las circunstancias que hay y al final hay que trabajar con lo que uno tiene. Está claro que los campos son mejorables, pero si lo comparamos con otras ciudades y otros equipos, ya la diferencia no es tan grande. Incluso salimos ganando en algunas de ellas».

«Yo creo que tenemos que estar centrados en que el club tenga una estabilidad deportiva, que este año no lo ha tenido. Al final tiene que ser un cúmulo todo. Si el primer equipo va mal y toda la cantera va bien… El club va mal. Y si el primer equipo va bien, aunque la cantera no pueda ir tan bien, va a ser la llave para para mejorarlo todo. Yo creo que el crecimiento del club en general pasa por el primer equipo. Eso es una realidad, pero eso no quita que mi gran lucha en todos los sitios que he estado ha sido el de sacar jugadores jóvenes y la importancia de sacar la cantera, de tener medios… Yo eso lo voy cuidar desde el minuto uno, pero sabiendo que, si somos capaces de ascender, el objetivo y estoy completamente seguro que no se va a conseguir sin trabajarlo, todo ello redundará en la cantera. Hay que llegar bien y sentar las bases bien. Tenemos un cuerpo técnico muy preparado y profesional para que puedan comandar toda la preparación del equipo y que se va a conseguir ese objetivo».

– Para armar una plantilla de 22 futbolistas en el que la mayoría serán caras nuevas y disponer de casi todos para el inicio de la pretemporada, ¿cuál es la estrategia a seguir? ¿A qué tipo de jugadores aspira el Recre?

«Queremos una mezcla entre experiencia y juventud. Yo creo que es importantísimo. Lo vamos a ver en campos que vamos a requerir más carácter, fuerza y garra. Y para ello el jugador necesitará de compañeros que sepan de que va esto y al final también de juventud. La máxima que se va a buscando es la de disponer de una estabilidad, una base en el equipo de cara a que el próximo año solo se tengan que hacer unos retoques. Este año hay que afrontar la competición con una serie de características que creo que están identificadas y que hacen necesario una serie de jugadores, y el año que viene si se consigue el objetivo, pues se retocará para adaptarlo en la categoría que estemos».

Altas y bajas en la plantilla

– Han llegado seis futbolistas que denotan un cierto patrón: Jugadores que son conocidos por ti en alguna etapa anterior o también por el entrenador, la mayoría de Sevilla y con experiencia en la categoría. ¿Hay sitio también para el jugador de Huelva y de la casa que quiera vivir una nueva etapa en el Decano?

«Es importante saber que jugadores de Huelva que pensaba que era importante contar con ellos, de cara a nuestro proyecto de ascenso, pudieran estar. Pero por distintas circunstancias, algunos han declinado ese ofrecimiento, no han fructificado las negociaciones ya sea por tema económico, de la categoría donde compite el Recre o temas personales. Está claro que si estuviéramos en Primera RFEF seríamos muy atractivos para todos, tanto para los de fuera como para los de casa. Pero ya digo que va haber gente de Huelva y estarán los que realmente han querido estar. Tengo que remarcar que yo no he llamado a los jugadores, ha sido el Recreativo. Dani Alejo como persona no lo hace, lo hace en nombre de la institución. Por eso los que estén y vengan, son los que han atendido la llamada del club y realmente quieren estar. No hay que poner una diana a los que no ha venido, pero la gente tiene que saber que era un deseo mío, el hecho de que pudiéramos contar con algún jugador más de Huelva y no ha sido posible. Entonces, no hay que rasgarse las vestiduras y si buscar las soluciones. Tenemos otro tipo de jugadores que van hacerlo lo suficientemente bien para poder cumplir el objetivo y eso era lo más importante. Yo creo que el aficionado, más allá de donde venga el jugador, lo que quiere es ver lo que yo comentaba antes. Que el equipo da la cara, pelea, lucha y sufre para poder conseguir un resultado positivo».

– Recientemente ha sido noticia la desvinculación amistosa de Alberto Martín. ¿Puede ocurrir algo parecido con Nauzet y Diego Jiménez o temes que será más complicado?

«Alberto se ha portado con el club de una manera exquisita. Cuando uno es trabajador y tiene las condiciones pactadas, eso lo intentan defender. Pero en el caso de Alberto puso en valor todo lo que el Recre hizo por él y la apuesta en años de contratos que hizo, y también el momento. Cuando el equipo desciende se recortan ingresos y hay bajada de presupuesto, y entendió que era justo el hecho de rescindir. Quiero agradecerle esa facilidad que dio al club, se ha puesto de manifiesto cuando el club anunció el acuerdo, pero creo que hay que ponerlo más en valor. Con lo que pase con el resto de jugadores, estamos negociándolo y creo que va a resultar también satisfactorio. Más allá de las vinculaciones que existan, todos son conscientes de la situación del club y que el año no ha sido propicio para que estemos juntos un año más. La mejor solución para todos es la que hemos planteado y espero que en los próximos días o semanas se solvente la situación y se rescindan los contratos de esos futbolistas».

– ¿Puedes aclararnos la situación de Víctor Barroso? Has hablado en anteriores ocasiones que solo continuarían canteranos, nombrando a Ponce y Fran, pero estaríamos hablando de otro jugador de Huelva. ¿Para seguir tendría que adaptarse su ficha a la realidad de la Tercera RFEF?

«Víctor Barroso tiene que seguir el paso de gente como Nauzet, Alberto y Diego, y tiene que ver esa posibilidad de salida. Como ya dije el otro día, todos nuestros jugadores merecen el máximo respeto, pero serán jugadores del Recre hasta que dejen de serlo. Es una realidad, yo creo que uno tiene que tener esa empatía y ese respeto hacia la vinculación que existe, y defenderlo hasta el final hasta que ya no esté».

«Una situación distinta puede ser la de Fran y Ponce, se cuenta con ellos y veremos a ver qué pasa porque ha habido el interés de varios equipos y eso al final hay que recalcarlo, ya que no solo está el club en disposición de que siga. Aunque tenga contrato en vigor, toca ver la decisión que toma el futbolista y ver si se puede llegar a un entendimiento, si esa oferta se concreta y no coartarle esa posible proyección que pueda tener si se va».

– En cuanto a Fran, ha trascendido tanto la intención del club de renovarlo, como el hecho de que haya equipos que podrían querer incorporarlo. ¿Qué está más cerca en estos momentos, su continuidad en forma de renovación o su salida en forma de traspaso que pudiera beneficiar a ambas partes?

«Nosotros estamos centrados en que siga, sabiendo que esa situación de salida se puede dar. Hay que poner en común esa necesidad y esa intención de que el club quiere contar con ellos, y saber si hay esa reciprocidad. Con Fran lo primero que hice fue tener una toma de contacto, hablando con él varias horas, estuvimos cómodos los dos y le hice ver la importancia que tiene que tener este año en el Recre. Eso hay que traducirlo a veces en otro tipo de intenciones del club y es verdad que se le ha propuesto la renovación por tres años, mejorando la situación económica que venía percibiendo. No solamente hay que decir que me importa un futbolista de la cantera, sino que hay que dar el paso demostrándolo. Hay que ser consecuente con lo que uno dice e intentar llevarlo a cabo. Ahora es el jugador el que tiene que tomar una decisión, si quiere o no quiere renovar, si quiere seguir con su actual contrato y terminar la próxima temporada para luego decidir su futuro, o si decide hacer caso al interés de algún equipo que pueda optar a él, y quiere que el club se condicione en pos de facilitarle las cosas».

– ¿Has negociado ya con clubes que estén interesados en Fran?

«Ahora mismo estamos esperando a ver si se concreta. Llegado el caso nos sentaremos con él y llegaremos al punto en común que siempre existe en cualquier negociación para que las dos partes queden satisfechas».

La figura de Alberto Gallego y su papel en el equipo

– ¿Qué tiene Alberto Gallego para haber sido el elegido para comandar la nave albiazul?

«Tiene todos los condicionantes necesarios para entrenar al Recreativo y todos los que me ponía a mí como elementos necesarios para un proyecto de bastante tiempo. Tema de cantera, tema metodológico, tema de éxitos… Al final todo es muy bonito, pero si uno no consigue los logros, todo lo que se haya hecho no servirá para nada. Él aglutinaba todos esos requisitos y desde el primer momento que hablo con él, la sintonía es increíble y la predisposición es máxima. Con el paso de los días y demás, aunque él tenía contrato en vigor y había ascendido a su equipo, priorizó por estar aquí y además no se filtró nada. Para mí eso es muy importante porque muestra una forma de trabajar y una forma de afrontar algo que uno no quiere perder. Cuando uno se muestra demasiado en prensa para dejarse querer mucho, al final uno intenta proyectarse más para llegar a otro público. Digámoslos así. Con las conversaciones que tuvimos, queríamos que fuera él y creíamos que iba a dar el paso como así fue. Que no saliera filtrado su nombre, incluso cuando ascendió, fue un plus».

– ¿Realmente Germán Crespo tuvo opciones de ser el entrenador del Decano o siempre tuvo clara su apuesta por Alberto?

«Me he encontrado en situaciones que no he pasado en Algeciras. Soy poco de leer la prensa, tengo gente que me cuenta lo que aparece publicado y así me sirve de filtro, pero es verdad que a veces me meto y he leído cosas como que el tapado era Chus o que era Germán… Teníamos una panda de tapados increíble. En la entrevista que me hizo Fran, cuando terminamos le dije que mira que, si al final no fuera Germán, tras todo lo que se estaba hablando de él y me dijo que se estaba jugando un poco con la prensa. De lo que puede hablar la prensa y la afición son de los hechos. El hecho de que el club vaya a firmar o quiera a un entrenador, tiene que partir del club y no puede partir de los medios».

– Pero reconoce que algo de utilización de medios si hubo con lo que dijiste de Pavón, ¿no?

«Es verdad que en mi rueda de prensa hubo algunas preguntas bastante directas sobre algunos entrenadores, para saber si eran o no eran y en ese momento fui muy directo y dije que no eran porque había unas pequeñas connotaciones que hacían necesaria que ese nombre no circulara más por los medios. Por ejemplo, yo con Emilio Fajardo no llegué a hablar, ni tampoco con su agencia de representación. Estaba ‘utilizando’ de alguna manera al Recre para su situación en el Xerez. Entonces, yo creo que no era de recibo que al final se utilice el nombre del Recre para ningún fijo y por eso fui contante. Por lo demás, hay veces que no se puede ni confirmar ni desmentir y por eso dije que podía ser una posibilidad».

– ¿Crees que el estilo de juego que quieres implantar y que Alberto Gallego hizo suyo en su presentación puede adaptarse a la realidad de la categoría, en la antiguamente denominada Tercera División Grupo X? ¿Crees que puede notar mucho las diferencias con respecto a los grupos balear y catalán?

«Al final esto se traduce en once contra once en el verde. Hay una cosa que me da mucho coraje, como cuando decían que en el grupo navarros había un delantero que había marcado 25 goles y decían de forma despectiva que porque era el grupo navarro. Y yo me pregunto si en el grupo navarro los porteros son mancos y allí no paran. Todo tiene su dificultad, todos los grupos son respetables. La forma que Alberto va a exponer su juego y el sistema que va a emplear y demás, quizás no es el usual y una vez se consiga desarrollar va a tener sus resultados. Yo recuerdo que el primer sistema de juego en el fútbol era un portero y diez atacando… De ahí ha pasado a lo que se está haciendo ahora mismo del 4-4-2 o el 4-1-4-1. Él en su presentación decía que a lo largo de un partido se viven situaciones que a lo mejor tiene que jugar con un 4-4-2 y él lo explicó perfectamente. Uno tiene que adaptarse a las situaciones, a todas las cosas. Él sabe perfectamente que no hay una fórmula secreta ni un sistema único para conseguir los objetivos. Hay que adaptarse a las circunstancias».

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