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«Hay que cambiar muchas cosas y hacer un gran trabajo de motivación»

El exdelantero del Decano y exentrenador del filial recreativista, Iván Rosado, dejó claro que «todo el mundo tiene su cuota de responsabilidad. Los jugadores tienen que saber la camiseta que se están enfundando, los técnicos tienen su cuota de responsabilidad… Y las riñas que pueda haber en el consejo de administración, eso se tiene que solucionar ya. El que tenga la sartén sobre el mango, debe de sentarlos a todos y decirles que no puede haber ni una grieta más».

Iván Rosado se moja. El que fuera delantero del Decano y entrenador del Atlético Onubense, habló en Teleonuba sobre la posibilidad de convertirse el futuro técnico del Decano. Algo de lo que no quiere oír hablar porque «hay un entrenador al que hay que respetar«. Eso sí, remarcó que «es una situación complejísima que no sea vivido y el que diga que está preparado para una situación así, en el que no hemos vivido nunca nadie, yo creo que se equivoca. Eso no quiere decir que no tenga el carácter, la personalidad y el conocimiento profundo de la plantilla, que para eso es mi profesión. Y los conocimientos y la plena convicción de que la plantilla puede darle la vuelta a la situación. Estoy convencido de ello, otra cosa es que la situación es crítica. La situación es la que es, pero yo soy de los que veo el vaso siempre medio lleno y no medio vacío. Pero es verdad que hay que cambiar muchas cosas porque si estamos en la situación que estamos es por deméritos propios«.

«Hay que hacer un trabajo de motivación enorme. Las semanas son eternas y cada semana a los jugadores les va a parecer un mes. Pero para eso están los técnicos, para ayudarles. Aunque hay que cambiar. Si estamos así es por deméritos propios, ellos sabrán y tendrán las herramientas suficientes para darle la vuelta a la situación. Si al final caemos, que sea porque el Cádiz B gana en Sanlúcar y nosotros con 24 puntos. Y empezar la siguiente fase con esa puntuación, ese es el objetivo que hay que marcarse«.

El técnico recordó que «ya se cometió el error en aquel partido contra el Villanovense, en esa fiesta posterior como si se hubiera ascendido y nos perjudicó. Pues ahora tuve esa misma sensación con el gol de Sillero. Un gol que nos debilitó más de lo que nos produjo. Creo que no se hizo autocrítica. Veníamos de dos derrotas seguidas… La gestión de emociones es muy importante. Si nos hubiéramos quedado con el sufrimiento que habíamos tenido para el partido, nos hubiera venido mejor. Pasamos del sufrimiento a una euforia desmedida. Aparte de la celebración, que solo nos faltó tirar cohetes y el champán, el mensaje creo que no fue el adecuado. Veníamos de perder contra el Cádiz y el Marbella, y creo que no se hizo la autocrítica necesaria de ese partido. Se dijo que el partido fue fantástico y el partido no fue tan fantástico. Entiendo que salga y hable que está muy contento por los jugadores, porque se han quitado un peso de encima, pero la realidad es que en la primera parte nos han hecho un gol y nos han creado las dos mejores ocasiones. Y en nuestro estadio, nuestro fortín, no nos pueden hacer tres ocasiones de gol. Ni San Fernando ni nadie, no hemos hecho nada. Pero el mensaje fue de una euforia desmedida«.

A la hora de repartir culpas del mal momento que atraviesa el equipo, indicó que «todo el mundo tiene su cuota de responsabilidad. Los jugadores tienen que saber la camiseta que se están enfundando, los técnicos tienen su cuota de responsabilidad… Y las riñas que pueda haber en el consejo de administración, eso se tiene que solucionar ya. El que tenga la sartén sobre el mango, debe de sentarlos a todos y decirles que no puede haber ni una grieta más. La base del equipo son los que dirigen. Si no hay unión en los que dirigen, lo demás se desmorona. Si hay esas guerras internas en los que dirigen el club, estamos rotos. Eso no puede suceder, o nos unimos todos… La propiedad es la que está legitimada para acabar con esto y decir se acabó. Y en el consejo lo saben«.

«El barco está a la deriva y por eso es importante que el que se tenga que sentar, los una y si no se quieran unir, pies en polvorosa. Es que si no vamos al remolino que nos va a hacer desaparecer del mapa futbolístico«, lamentó.

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