"Cuando pasan dos entrenadores, el problema somos nosotros"

El defensa albiazul, Rubén Serrano, asumió responsabilidades en nombre del vestuario y pidió fe a la afición en el tramo decisivo de la temporada. Asimismo, admitió el dolor por los cánticos del Nuevo Colombino y señaló que "el problema somos los jugadores, no los entrenadores".

En una semana marcada por el relevo en el banquillo del Recreativo de Huelva, Rubén Serrano ha asumido la responsabilidad en nombre del vestuario. El defensa albiazul, criado en la cantera del Decano, no ha eludido la autocrítica y ha hablado con claridad en un momento clave de la temporada, con la primera de cinco finales en el horizonte.

"El mayor compromiso que puede tener un jugador con este club es que la afición se sienta orgullosa, y no lo estamos logrando", confesó Serrano ante los medios, en declaraciones recogidas por Huelva24.com. El onubense no escondió que le dolieron especialmente los gritos de 'no os merecéis esta camiseta' tras la goleada sufrida ante el Real Madrid Castilla: "A mí eso me hiere. Me hierve la sangre. Escuchar eso en mi casa… me como por dentro".

Serrano insistió en que el vestuario comparte el dolor de la grada: "Ahora mismo tenemos que aguantar todo. La única forma de responder es en el césped. La afición lo pasa mal y nosotros también".

Sobre la dinámica interna del grupo, el zaguero explicó que "llevamos todo el año reuniéndonos, aclarando cosas, diciéndonos verdades a la cara, pero no hemos conseguido traducir eso en resultados". Aun así, defendió el compromiso de los jugadores locales: "Somos muchos de Huelva, esto nos duele más todavía. Nos hemos criado aquí. No a todos les puede doler igual, pero tratamos de transmitir lo que significa este escudo".

La destitución de Íñigo Vélez ha supuesto un golpe en el vestuario. "No me lo esperaba, sinceramente. Pero es más fácil echar a uno que a veinticinco. El problema no son los entrenadores, somos nosotros. Al final cuando han pasado dos entrenadores y no tenemos resultados, pues está claro que el problema somos nosotros", reflexionó con crudeza. Sobre el nuevo míster, Raúl Galbarro, Serrano señaló que "estamos asimilando sus ideas, una propuesta más combinativa. Tenemos por delante cinco finales y estamos comprometidos al máximo".

Aun con la salida de Vélez, el defensor tuvo palabras de reconocimiento para él: "Ha sido un profesional impecable. Preparaba los partidos con todo detalle. Sabíamos lo que podía pasar ante el Castilla y así fue. Nos hicieron cuatro goles por lo mismo. No sé si es falta de capacidad, pero el caso es que nos los hacen".

Todo o nada en Alcoy

Con el Alcoyano como primer obstáculo, Serrano no duda en calificar el duelo como crucial: "Se me ponen los pelos de punta solo de pensarlo. Por este partido pasa nuestra salvación y hay que ir con hambre. Sabemos el tipo de campo que es y debemos tener las ideas claras para traernos los tres puntos". Pero incluso si el resultado no acompaña, Serrano pide seguir creyendo, ya que "mientras las matemáticas no digan lo contrario, hay que pelear".

Consciente del descontento en la grada, el defensor entiende que "la afición actúe como lo hace. Todos sabemos el club que representamos, el peso de este escudo. Cuando te llama el Recre lo sabes. No se están dando los resultados y no tenemos nada que reprocharles. Lo entendemos perfectamente".

En lo individual, Rubén no es ajeno al mal momento. "Estoy jodido por no poder mostrar el nivel que creo que puedo dar. No pienso en mí, sino en aportar al colectivo. Lo único importante ahora es que el equipo se salve", remarcó.

Por último, se refirió a la posible aportación de Sebastien Pineau, del que dijo que "lo veo con hambre, con ganas. Es un delantero con gol, que sabe moverse dentro del área. Está en buena forma, aunque la competición es otro ritmo. Estamos deseando que pueda ayudarnos".

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