Veteranía y sentimiento en tiempos de reconstrucción

Manu López
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24 julio, 2025

El club apuesta por el arraigo y la experiencia de Antonio Domínguez y Caye Quintana, dos referentes formados en la cantera para liderar el resurgir albiazul.

En un momento en el que el Recreativo de Huelva se reinventa tras un duro golpe como el descenso a Segunda RFEF, hay decisiones que van más allá de lo meramente deportivo. Y una de ellas es mantener como pilares del nuevo proyecto a dos futbolistas onubenses que sienten como pocos este escudo: Antonio Domínguez y Caye Quintana. Ambos, nacidos y criados en la cantera recreativista, representan una mezcla de identidad, talento y compromiso que puede ser diferencial en una categoría tan complicada como esta.

Su regreso al club hace dos temporadas fue celebrado por el recreativismo como el retorno de dos hijos pródigos. Y aunque en la 23/24 rindieron a un buen nivel, el rendimiento colectivo e individual del pasado curso dejó mucho que desear. Ni ellos, ni la mayoría de sus compañeros, lograron estar a la altura de lo que se esperaba, y el equipo acabó perdiendo su sitio en la Primera Federación. Sin embargo, lejos de marcharse o buscar un nuevo rumbo lejos de casa, ambos han decidido quedarse y asumir el reto. Y eso dice mucho.

Con 32 años para Domínguez y 31 para Caye, están lejos de ser promesas, pero todavía tienen mucho fútbol que ofrecer. Quieren cerrar el círculo donde todo empezó, y qué mejor manera que liderar desde dentro la vuelta al fútbol profesional del club de su vida. La llegada de nuevos propietarios y una línea clara de actuación han reforzado ese compromiso, en un vestuario que necesitará referentes con peso específico para guiar a los 12 fichajes (por ahora) que se han incorporado.

Resurgir desde el perdón mutuo

Porque Antonio Domínguez, con su calidad técnica, su visión de juego y su golpeo privilegiado, sigue siendo un arma muy valiosa a balón parado y en los metros finales. Y porque Caye Quintana, con su experiencia y su olfato, puede ser ese delantero que, sin grandes alardes, siempre aparece cuando más se le necesita. Ambos conocen el club, la ciudad, el entorno... y eso no tiene precio.

Ahora bien, para que esta apuesta llegue a buen puerto, también será necesario un ejercicio de madurez y reconciliación por parte de todos. Ellos deben recuperar su mejor versión sobre el césped, y una parte de la afición debe dejar atrás ciertos reproches del pasado. El objetivo es común: devolver al Decano donde merece estar.

Por todo esto, el Recreativo no se lo ha pensado dos veces. Domínguez y Caye seguirán siendo importantes. Muy importantes. Por lo que representan, por lo que pueden aportar, y porque en tiempos de reconstrucción, contar con raíces firmes es vital.