Tras el empate (1-1) con el Fuenlabrada, el puesto del técnico albiazul está en el alambre ante un posible cese. Por parte de la afición recreativista, los gritos y críticas fueron dirigidos contra los dirigentes albiazules.

Ha sido un partido de alta tensión, por lo todo lo que se jugaba Abel Gómez en la séptima jornada del grupo 2 de la Primera Federación. El técnico albiazul tenía un ultimátum, aunque no tuviera confirmación de ello. La falta de información, denunciada por el propio Abel dirigéndose a los responsables del club decano, enrarecieron la previa de un partido marcada por esta noticia y no lo que se jugaba el Decano. A priori debían ser tres puntos más, pero se convirtieron en tres puntos claves para el proyecto deportivo.
Porque el cese de un entrenador tan pronto, siempre más y más cuando se trata del entrenador que acaba de igualar los mismos partidos, con 84, que una leyenda como es Marcelino García Toral. Tras dos temporadas y pico, el futuro del granadino está en el aire por el empate de su equipo en casa ante el Fuenlabrada. Un empate que vuelve a dejar a los albiazules, una semana más, como últimos clasificados, aunque a solo 3 puntos de la permanencia.
La noticia filtrada durante la semana al programa 'Ser Deportivos Huelva' era clara, si el equipo no lograba la victoria este sábado, Abel Gómez sería cesado y dejaría cargo en el banquillo albiazul. La rumorología sobre el futuro inquilino apunta ya varios nombres, desde técnicos como Salmerón o Abel Segovia, hasta opciones interinas desde dentro del club. Se tome la decisión que se tome, el Recre deberá hacer un desembolso económico importante, ya que deberá llegar a un acuerdo económico con el finiquito del aún entrenador del Decano y su cuerpo técnico, además del gasto que conlleve la contratación del nuevo. Así las cosas, no parece una decisión fácil, ni mucho menos.
El propio Abel habló de todo esto en rueda de prensa, reconociendo que "a día de hoy no tengo ninguna noticia y desde el consejo no me han dicho nada. En el fútbol llevo más de 20 años de profesional y ya he vivido muchas situaciones. Yo esta semana me he dedicado a entrenar y a preparar bien el partido. Aquí todo el mundo tendrá sus opiniones y nosotros como entrenadores sabemos lo que tenemos y lo que nos jugamos. Hace dos años sí que me dijeron que había habido una reunión y que habían decidido que si no llegaban los resultados tomarían una decisión, pero esta semana no me han dicho nada pese a esa filtración y como gente de fútbol me habría gustado saberlo". A este respecto, sí reconoció que Juan Alfaro bajó al vestuario a darle ánimos, y que el trato tanto con él como con Óscar Arias es fluido, por lo que sus quejas iban dirigidas a la directiva albiazul.

El consejo de administración, señalado
Una directiva que sí recibió en el tramo final del partido cánticos solicitándoles la dimisión por parte de los aficionados que se dieron la vuelta para mostrarles su crítica. Durante el partido la afición, en su gran mayoría, estuvo respaldando tanto al equipo como al propio Abel, aunque al final del encuentro los despidió con una pitada, mucha de ella dirigida a la zona noble.
Por su parte, Abel Gómez, sabedor de que puede estar viviendo sus últimas horas como entrenador recreativista, salvo que refuerce su figura, ya sea por medio de un comunicado o por la misma falta de noticias durante la semana, dejó claro que tiene "la conciencia tranquila. A nivel mental estoy fuerte y sigo confiando en mi manera de trabajar y de ver el fútbol. Es la misma que he tenido estos años atrás y no la voy a cambiar. Siempre he intentado anteponer los intereses del club por encima de los míos y yo tengo la conciencia tranquila porque me estoy vaciando y a veces no sabes ya lo que hacer. Tengo que morir con mis ideas y mi forma de ver el fútbol. Tengo aquí en Huelva a mis padres, que han venido este fin de semana conmigo, y estoy deseando de irme con ellos y con mi mujer y mi hija a mi casa, así que no tengo ni idea de qué pasará".

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