"Está siendo una temporada de mierda, vamos a luchar hasta el final"

Rubén Gálvez cree que al equipo le puede beneficiar jugar fuera de casa en este tramo final: "Nos falta personalidad y calma cuando las cosas se tuercen". El capitán del Recreativo también asume culpas y confía en revertir la situación con la llegada de Raúl Galbarro al banquillo.

El capitán del Recreativo de Huelva, Rubén Gálvez, no se mordió la lengua a la hora de analizar la delicada situación que atraviesa el Decano. El guardameta, referente en el vestuario y uno de los pesos pesados del plantel, habló con la claridad que exige el momento, reconociendo que la temporada está siendo muy dura para todos.

Sobre el reciente relevo en el banquillo, con la salida de Íñigo Vélez y la llegada de Raúl Galbarro, Gálvez fue sincero: "En el vestuario nos cogió por sorpresa. Al final es una decisión que toma el club y nosotros no somos quién para decir si estamos o no de acuerdo. Con el nuevo míster llevamos dos días y está intentando inculcarnos sus ideas. Nosotros tenemos que adaptarnos cuanto antes porque no hay tiempo que perder", dijo en declaraciones recogidas por Huelva24.com.

Sin excusas, el capitán albiazul asumió la parte de responsabilidad que le corresponde al grupo: "Cuando echan a un entrenador, los principales culpables somos los futbolistas. Los resultados indican que como equipo estamos haciendo una temporada mala. El fútbol está montado así: cuando las cosas no van bien, es más fácil echar a uno que a veinticinco".

No faltó autocrítica, pero tampoco faltó esperanza. Rubén Gálvez se aferra a los precedentes y a la lucha por la permanencia: "El Yeclano parecía descendido y ha salido, el Marbella parecía salvado y se ha metido en la pelea... Nosotros vamos a pelear hasta el final. Sabemos que está siendo una temporada mala y de mierda. Pero tenemos que hacer piña y sacar esto adelante".

El meta onubense también analizó el último partido frente al Castilla, en el que el equipo compitió bien en el arranque pero terminó desbordado: "Tuvimos unos primeros 25 minutos buenos, pero cuando les dejamos correr se vio lo que pasó. Trabajamos cada semana para darle alegrías a la afición y porque creemos que nos lo merecemos. Estamos muy jodidos porque los resultados no llegan, pero tenemos que mantener la calma, llevar con orgullo este escudo y seguir luchando".

De cara al tramo final del campeonato, con cinco jornadas por delante, Gálvez sorprendió con una reflexión sobre el factor campo: "Quizás ahora mismo nos venga mejor jugar fuera que en casa. No es por criticar a la afición, ni mucho menos. Es una cuestión de mentalidad. Este año, cuando las cosas se nos ponen en contra, nos falta personalidad para revertir la situación. En casa hay que llevar el peso del partido, y eso nos está costando. El del Alcoy será un partido de muchos duelos, y tal vez eso nos beneficie".

Con un discurso honesto, sin rodeos, Rubén Gálvez lanza un mensaje claro: el Recreativo se lo juega todo en cinco partidos y no está dispuesto a rendirse.

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