Cruel descenso para un Juvenil B que no mereció tanto castigo

El segundo equipo juvenil del Decano, víctima de los arrastres procedentes de la División de Honor, desciende a categoría provincial tras caer por 3-2 en la última jornada ante el Pozoblanco.

Nadie puede dudar que la temporada del Juvenil B del Recreativo de Huelva estaba siendo más que positiva. Durante gran parte de la temporada estuvieron instalados en una zona cómoda de la tabla, pero el riesgo de una competición con los arrastres, metidos con calzador durante la temporada, era una posibilidad que sobrevoló en las últimas jornadas, hasta llegar a un último partido que se convirtió, por desgracia, en un inesperado traspié.

Los de Paco Pichardo lo tenían todo a favor, dependían de sí mismos para certificar la permanencia matemática. Solo tenían que ganar a un rival ya descendido y esperar lo que ocurriera en la División de Honor con el Juvenil A. Con 38 puntos sumados, parecía una locura pensar en la posibilidad de descenso. Pero desde el primer momento el partido ante el Pozoblanco se torció. El equipo cordobés se adelantó pronto en el marcador, pero Jesuli puso las tablas en el marcador antes del descanso. Con todo por decidir en la segunda parte y con buenas ocasiones para voltear el marcador, fue el Pozoblanco el que le puso la puntilla a los recreativistas con dos nuevos goles. A balón parado llegaba la sentencia en un partido en el que los albiazules hicieron el 3-2 por medio de Valladares, pero sin tiempo ya para optar a la igualada.

La derrota, unida a la clara victoria del Nervión por 0-6 en el feudo del colista, desemboca en el dramático descenso a la Segunda Andaluza, categoría provincial. Los albiazules terminan en la undécima posición, viéndose afectado por el arrastre en la División de Honor, con los cuatro descensos ya seguros de equipos de la zona occidental de Andalucía. Duro final para un equipo que mereció mucha mejor suerte.

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