Las claves para entender la nueva realidad que debe afrontar el Recre

Tras solicitar Pablo Comas la ejecución de la sentencia, será el TSJA el que decidirá si aplicarlo o no, con independencia del recurso de casación. El Decano mantuvieron reuniones en el día de ayer para dilucidar la estrategia.

Días duros los que le esperan al Recreativo de Huelva y su afición tras conocerse en el día de ayer la notica que ha tambaleado los cimientos del club. El TSJA ha anulado la expropiación y le devuelve las acciones a Gildoy España SL. Una difícil realidad con la que el Ayuntamiento, el actual propietario del club, debe dilucidar para asegurar la supervivencia de la entidad decana.

De momento, tal y como han informado en rueda de prensa, agotaran todos los resquicios legales que estén a su alcance, y al no tratarse de una sentencia firme, presentaran recurso al Tribunal Supremo.

El problema reside, como especifica el artículo 91 de la Ley de la Jurisdicción contencioso-administrativa, es que la preparación del recurso de casación no impedirá la ejecución provisional de la sentencia recurrida. Así, especifica que «las partes favorecidas por la sentencia podrán instar su ejecución provisional. Cuando de esta pudieran derivarse perjuicios de cualquier naturaleza, podrán acordarse las medidas que sean adecuadas para evitar o paliar dichos perjuicios. Igualmente, podrá exigirse la presentación de caución o garantía para responder de aquellos. No podrá llevarse a efecto la ejecución provisional hasta que la caución o la medida acordada esté constituida y acreditada en autos».

Ante este panorama y una vez ya conocido que Pablo Comas ya ha solicitado la ejecución de la sentencia, según pudo informar esta web, será el TSJA el que debe valorar si debe «denegar la ejecución provisional, siempre que considere que se puede crear situaciones irreversibles o causar perjuicios de difícil reparación».

Así las cosas, en el peor de los escenarios, Pablo Comas podría recuperar la gestión del club mientras tiene lugar el recurso de casación. Un escenario que complicaría la viabilidad de un club que debe concretar en breve nuevos fichajes y en el que Jesús Vázquez y Begoña Calderón figuran como consejeros delegados mancomunados, o lo que es lo mismo, es necesaria la firma de ambos para cualquier tipo de gestión.

Así las cosas, ya son bien conocidos los muchos burofaxes que remitió en el pasado el que fuera presidente del Recre desde 2013 hasta 1017, y que a buen seguro volverá a enviar para presionar, si considera que es la persona encargada de firmar en nombre del club. Cabe recordar que en la fase más temprana de la expropiación, Pablo Comas bloqueó operaciones, al no disponer el nuevo consejo de la capacidad de firmar. En el recuerdo lo que ocurrió con Pavón y Alejandro Ceballos.

Ha llegado el momento de unir fuerzas de todos los sectores del club

Ante este panorama tan incierto, en el día de ayer hubo reuniones en las oficinas del club para tratar la estrategia a marcar, a buen seguro, con representantes de la actual propiedad.
Esta mañana, el club publicó en redes sociales un mensaje de tranquilidad destinado a la afición: «Tras los últimos acontecimientos judiciales relativos a la sentencia que revoca la expropiación de las acciones de la entidad, el consejo de administración del Real Club Recreativo de Huelva quiere informar a la afición de su irrenunciable compromiso con la institución y su vocación de servicio al club. Seguiremos trabajando con más ilusión y energía que nunca por el Decano».

Así las cosas, la pelota se encuentra en estos momentos en el tejado de los políticos. Son los que deben buscar una solución, ya sea a nivel legal o privada, llegando a un acuerdo económico para la compra de las acciones de Pablo Comas.

A nadie se le escapa que el madrileño solicitará una cantidad desorbitada. Cabe destacar que en la sentencia del TSJA se hace mención en varias ocasiones del ‘caso estadio’ y de la cantidad que solicitaba el club al Ayuntamiento (29 millones de euros). Si lo que solicite Comas en una hipotética negociación con el Consistorio se parece mínimamente, no habrá posibilidad de llegar a un acuerdo. Asimismo, es poco probable que un nuevo equipo de gobierno que ha remarcado en elecciones que el club decano tiene que navegar hacia la sostenibilidad, acepte ahora a hacer un desembolso de ese calibre para salvar al Decano.

Entonces, llegados a este punto, ¿cuál es la solución? Confiar en el recurso de casación y también en el innegable hecho de que el Ayuntamiento es el principal acreedor del club, con una deuda de 11,7 millones a enero del 2022. Una carta bajo la manga sobre la que trabajar.

Por otro lado, desde el recreativismo han dejado claro que ha llegado el momento pelear. De que todas las partes que componen el entorno del Decano limen asperezas y se unan en un único fin, luchar por la salvación del club, exigiendo los responsables que se llegue a una solución y deje de política al margen.

La peña recreativista Almenara, de Punta Umbría, exigió en sus redes sociales que haya «unión entre los políticos, que no utilicen este hecho para ganar un puñado de votos y que por una vez vayan a una y solucionen este revés».

En esta misma línea se mostró el que fuera alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, explicando ayer a los micrófonos de Hispanidad Radio que «la noticia me preocupa porque era algo que no queríamos, pero también nos va a dar la oportunidad de demostrar que queremos al Recre, que sabemos que es nuestra seña de identidad, que estamos dispuestos a defenderla, vamos a sacarlo adelante y eso solo hay una forma de hacerlo, es uniéndonos y no haciendo ningún tipo de uso, sino estando todos juntos, en el mismo sitio. El club necesita estabilidad, para que siga por la misma senda deportiva que lleva, que es magnífica».

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