La fiel infantería albiazul vuelve a estar al pie del cañón

Manu López
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31 enero, 2024

Hablamos con Edu Calero, conocido recreativista que perteneció en su día a la directiva del Trust, siendo uno de los firmantes de la querella contra Pablo Comas. Desde su experiencia valoró como voz autorizada la situación actual y de las claves para el futuro.

En plena crisis institucional tras conocerse la bomba informativa de la victoria de Pablo Comas en los juzgados y la correspondiente anulación de la expropiación, la afición recreativista asiste a este momento crítico en la estabilidad del club con temor, pero con el convencimiento de que solo la unidad servirá para frenar a aquellos que tanto daño hicieron al club.
Una de esos recreativistas que conoce en su propia piel lo duro que fueron esos tiempos, en los que la afición tuvo que tirarse a la calle y organizarse, estando en la creación de la asociación ‘Recre Trust’, de la que fue directivo y uno de los firmantes en la querella que llevó al expresidente del Decano a los tribunales, siendo condenado inicialmente a tres años de cárcel por administración desleal y falseamiento de cuentas, para finalmente, previo recurso, quedar la sentencia reducido a un año y tres meses de cárcel por falseamiento de cuentas sociales en relación con su gestión, en aquella época (2012-2017) al frente del club onubense.

Una circunstancia nada grata y que poca gente puede decir a boca llena que hizo frente a la injusticia desde la valentía y el arrojo. Se trata de Edu Calero, un recreativista humilde, enamorado de su club y su historia, y sin duda una de las voces autorizadas para hablar de esta etapa, al estar en primera línea y tener enfrente, ya que tuvo que acudir como firmante de la querella y testigo en el juicio celebrado en Huelva, al que muchos llaman ‘el innombrable’.

De dicho momento recordó que «en el momento de firmar la querella, las cuatro personas éramos Roberto Sánchez, Narciso Rojas, José Garzón y yo. Para mi fue el ejemplo de unión que ahora debe seguir en el entorno del club, de cuatro personas muy diferentes, que podíamos pensar de una u otra manera, pero que teníamos un fin y un objetivo común. Para mí, ir como testigo en el juicio, más allá de un marrón o de situaciones desagradables, que también claro que las hubo y demás, y de un tiempo de tu vida que dedicas tan intensamente, es motivo de orgullo. Recordar que estuvimos ahí y ese momento de la historia del Recre hicimos algo importante».

En declaraciones a Albiazules.es, se presentó como «un recreativista que no es de cuna, que el flechazo me vino por atracción y después de muchos años con alegrías y sinsabores, estando al lado del Recre, llegó el momento muy crítico en el que una serie de personas decidieron crear el ‘Recre Trust’. Yo fui a una reunión en la que ya estaban preocupados por la situación. Yo mismo por contactos profesionales con el club en aquel momento, de la empresa en la que trabajaba, ya estaba viendo indicios y evidencias, y cosas de dentro que denotaban lo que estaba pasando. Llegado ese momento decidí que había que dar el paso. Era una situación en la que había que echarle horas al Recre, más allá de ir a los partidos cada dos semanas y disfrutarlo. Había que remangarse y gracias a tantos voluntarios, y tanta gente que se aunó, y tantos compañeros de la directiva que también dieron el paso valiente, y la decisión que se aprobó de presentar una querella».

A esto último recordó que «nos presentamos cuatro de los directivos para la firma de dicha querella. Éramos los representantes del ‘Recre Trust’. Un acontecimiento duro que con el tiempo parecía que se iba atenuando y quedaba en el recuerdo, y ahora otra vez se vuelve a hacer latente».

Edu ha encajado como todo el recreativismo la noticia de la anulación de la expropiación como un directo a la mandíbula, como un golpe directo a su corazón que late en albiazul. «La noticia de la resolución del recurso, tumbando la expropiación del club por parte del Ayuntamiento, me sentó como a cualquier recreativista. Fue un jarro de agua fría, tuve que ver la noticia varias veces en el móvil porque no me lo creía. No me cabía leer eso en estos momentos. Pero como los recreativistas tenemos ese resorte, ya que estamos acostumbrados a que habitualmente vengan mal dadas, por nuestro propio sino o por nuestra identidad , pues acto seguido fue pensar en que esto se podía revertir, que lo hemos hecho tantas veces ya que se puede hacer, y sobre todo la responsabilidad de intentar transmitir ilusión, esperanza, positivismo y buenos augurios, todo lo contrario a buscar culpables, a la crispación y cosas negativas que creo que ahora mismo no nos beneficiarían para nada», comentó.

En cuanto a la validez de la expropiación, siempre lo tuvo claro. «Si nos retrotraemos en el momento que se ejecuta aquella expropiación, yo creo que era la única salida. De hecho, creo que todos los que estuvimos cercanos a aquellos momentos con respecto a lo que estaba sucediendo sabemos que el peor desenlace era algo inminente si no se producía algo tan milagroso como la expropiación para poder tomar las riendas del club, y así pagar antes del 30 de junio, etc… No había otra solución para evitar que el club se hubiera ido al abismo. Con independencia de criterios jurídicos y de cosas que creo que los expertos saben mucho más que yo, creo que fue la única solución que en aquel momento hubo, que a nadie se le ocurrió y que hubo personas que pensaron que esa podía ser una salida y gracias a Dios por aquello, años después seguimos teniendo al Recre latiendo».

Su mensaje a los políticos y a los responsables de encontrar una solución a este entuerto solo tiene una vía. «Lo único que les diría, algo que ya saben, es sepan que tienen en sus manos el destino del símbolo más genuino, auténtico y puro que existe en Huelva capital y provincia, porque hay otros muchos referentes y otras muchas cosas de las que sentirse orgullosas, pero el Recre es algo que todo el mundo sabe que es singular, que es único , que sabe que nos necesita y por eso la gente se involucra tanto, porque es consciente de que gracias a cada granito de arena, a cada empuje y a cada detalle, a cada cosa que aporta por el club, este sigue vivo y por eso nos sentimos importantes por eso. Es momento de unión, porque no hay cosa que más te duela, cuando en una familia hay un problema gordo, tiene una enfermedad y un drama, que ver a los tuyos divididos. Es algo que no procede. Sin duda sería una postura poco inteligente y poco idónea para ese momento. A la afición lo que más le duele en este momento es que pueda haber un partido u otro, sea el que sea, que quiera aprovechar tanto antes, como ahora o en el futuro, una coyuntura referente al Recre para sacar rédito político. El que no sabe eso parece que quizás no ha seguido de cerca al Recre o no es consciente de que es así. Porque es lo único que le pide la afición a los políticos, que hagan su trabajo, que pongan toda la carne en el asador y que intente no instrumentalizar para nada lo que se haga, porque se ha hecho desde un signo y desde otro. Con mejor o peor fortuna, pero la parte política, para bien o para mal, siempre ha sido fundamental en la subsistencia del Recre», indicó.

También habló del papel que debe encaminar la afición, destacando que «la afición es camaleónica en el sentido de que si tiene que extremar su apoyo en lo deportivo, en su fidelidad lejos y cerca del Nuevo Colombino, lo va a seguir haciendo. Si tiene que dar un paso también, como tantísimas veces ha dado en aspectos como el económico y de la índole que sea, lo va a dar. Yo creo que la afición, no creo que nadie tenga la duda, va a estar a la altura. Lo ha estado tantas veces ya, que solo dudarlo es equivocarse».

A este respecto, habló de la posibilidad de que la afición volviera a manifestar de manera masiva en las calles, indicando que «no sé si será el momento o no, y si eso puede tener peso en un proceso judicial como este. Ya todo lo que se ha tenido que demostrar en este sentido, se ha demostrado. Pero sobre todo que fluya, que sea espontaneo y que la gente lo pida, y que no sea algo forzado. Lo importante realmente estará en el apoyo constante desde todos los ámbitos que va a demostrar la gente. Seguro que estarán encima, empujando y no en una fecha concreta, o en una manifestación con un número de asistentes. Ese asunto a mi no me preocupa ahora mismo».

Unidad de los políticos

Edu también manifestó que «no tengo miedo a lo que pueda pasar. La palabra correcta sería la de preocupación o impaciencia por saber lo que pasa, y ganas de saber como ayudar y poder volver el granito de arena que haga falta para que el Recre salga, una vez más, de este atolladero. Pero miedo no porque hemos tenido tantas vicisitudes, que parece que vivimos en el purgatorio. Entonces, cuando estamos acostumbrados a eso, la palabra miedo… Convivimos con los problemas. No es miedo, es ganas de solventar la papeleta».

Por último, habló de lo que para él será la solución a todo esto, remarcando que «ojalá hubiera una solución maestra y mágica, que haciéndolo se solucionara. Puede que la haya y seguramente ya se ha hablado, y se está comentando ciertas opciones que se podían haber hecho antes o que se pueden hacer ahora. Para mí la solución pasa por la unión y no como cuando se dice que todos estemos unidos, y la afición es la primera que no tiene dudas en ese aspecto. Me refiero a una unión respecto a los poderes políticos, a las instituciones y la gente que de verdad tienen el timón del Recre. No existe un Recre actual, o un Recre anterior de Gabi, o un Recre anterior de Perico Rodri… No, es el mismo. El club es el mismo. La gente pasa, pero el club sigue siendo el mismo. Entonces, todo lo que podamos entender que hay ciertas cosas que esa trazabilidad, ese sentido de estado… En aquel momento pasó lo que pasó y aunque no estuvieran en el gobierno municipal, esas personas que estuvieron antes me pueden ayudar para arrojar luz. Y al revés, todo lo que sea esa generosidad, entendida como transmisión de información, de ideas y de soluciones entre los dos partidos mayoritarios, y que han estado en el gobierno de la ciudad en todos estos años, yo creo que ganaríamos tiempo y sumaríamos. Yo creo que es lo mínimo exigible y para mí sería la solución en abstracto. Ya luego soluciones jurídicas y de otro tipo, ojalá las tuviera. Pero creo que para que se llegue a ese punto, tiene que ser con esa comunicación fluida y con ese sentido de estado albiazul de todas las personas que han llevado el devenir del club en cuanto a su gestión en estos últimos años».